Título: Lo quiero a él
Fandom: Teen Wolf Pareja: Peter Hale x Stiles Stilinski
Autor: Tahlruil Trabajo original: I What That One
Traducción: KiraH69
Género: Yaoi, Slash
Clasificación: TP Advertencias: ninguna
Capítulos: 3 (3 de 3) FIN
Resumen: Con el asentamiento de su clan amenazado por oscuras criaturas que se arrastran desde las oscuras grietas del océano, el pueblo de Peter necesita toda la ayuda que pueda obtener. La tribu guerrera de octarianos que posee un territorio cerca del suyo podría ser parte de la respuesta... pero Peter duda que su hermana sea capaz de asegurar la alianza sin su ayuda, mucho menos cuando considera a los octarianos inferiores a los sirénidos.
Peter los tiene en más estima que su hermana, pero no tenía intención de emparejarse con uno de ellos, no cuando estaba feliz por su cuenta y disfrutaba rechazando los candidatos que Talia le presentaba constantemente.
Y tiene la sensación de que nadie había previsto a Stiles, su (futura) pareja, y su forma de echar abajo los planes mejor trazados.
Capítulo 3
Peter
no fue quien encontró a Stiles.
Erica
y los octarianos –Jordan y Liam– lo habían hecho bien a pesar de
eso. Se encontraron con algunas pequeñas amenazas y las superaron
con nada más que unos mínimos cortes y hematomas. Los octarianos le
habían impresionado bastante y le había complacido la forma en que
Erica estaba completamente dispuesta a trabajar con ellos, adaptando
su forma de luchar para acomodar y complementar sus propios estilos.
En la mente de Peter eso había reforzado los beneficios de la
alianza y si su hermana encontraba la forma de arruinarla, iba a
considerar seriamente un golpe de Estado.
Uno
de los últimos obstáculos que enfrentaron fue un tiburón hembra.
Envejecida y marcada por una vida bien vivida, no dejaría de atacar
hasta que Peter finalmente terminara con su dolor. Había recibido
algunos buenos golpes de su cola y sus costillas se sentían
magulladas y sensibles mientras los cuatro trabajaban juntos para
llevar el cuerpo a casa. Si bien su clan no solía buscar tiburones,
proporcionaría bastante comida, junto con dientes y otras cosas que
podrían utilizar. Habría sido un desperdicio dejar que el cuerpo se
pudriera en el agua y llevaban fuera el tiempo suficiente como para
pensar que era mejor regresar para ver si algo había cambiado.
Al
llegar a la pared exterior del asentamiento, sin embargo, vio que su
captura no iba a ser la gran noticia del día.
Alguien
había matado a un druaqon. Aunque ni de lejos eran las criaturas
oscuras más grandes, seguían siendo agresivos y difíciles de
derribar sin un plan sólido y, preferiblemente, al menos tres
sirénidos. Sin embargo, Peter dudaba mucho de que ningún sirénido
hubiera participado en el asesinato de esta bestia en particular. No
con Stiles erguido orgulloso a su lado, una lanza goteando con icor
negro en su mano; parte de ello también estaba untado en sus brazos
y en una larga línea por su espalda. En esa misma línea había
grandes ronchas donde la criatura había alcanzado a Stiles. Peter
sabía por experiencia que eran dolorosas y tenía toda la intención
de sentar a su estúpida pareja tan pronto como fuera posible para
poder cuidar de ellas.
—¿Erica?—murmuró,
con los ojos fijos en el maravillosamente estúpido octariano con el
que había planeado totalmente entrelazar su vida—. ¿Podrías ir a
ver a Deaton y asegurarte de que se está preparando un lote del
antídoto para el veneno de druaqon? Si nadie ha tenido el cerebro
para solicitarlo antes de que yo llegara, que comience uno.
—Así
que esa es tu pareja, ¿eh?—le dijo ella, una voz cargada de
interés y sugerencia—. Puedo ver por qué te gusta tanto,
Peter—cuando él la miró inclinado la cabeza, ella estaba
sonriendo. Tan pronto como gruñó, la muy descarada le guiñó un
ojo y luego se dirigió a ver a Deaton como le había pedido.
—Mocosa—murmuró
antes de mirar a sus ayudantes octarianos—. Podemos dejar el
tiburón aquí; los cocineros vendrán a recuperar la carne. Creo que
será mejor que vayamos a ver cuántos problemas tiene mi pareja.
—Vosotros
dos ni siquiera estáis-
—Cállate—interrumpió
Jordan antes de que Peter pudiera, dándole un codazo a Liam en el
estómago mientras hablaba—. Stiles fue y mató a un monstruo para
él y Peter estaba listo para matar a uno para mantener a salvo a
Stiles. Tengo la sensación de que si John o Talia intentan ponerse
en medio de esta relación, serán ellos los que terminarán
retrocediendo.
—Por
supuesto que sí—dijo Peter con una sonrisa, decidiendo que le
gustaba Jordan, pero que felizmente apuñalaría a Liam unas cuantas
veces (aunque en lugares no fatales, ya que le había ido bien contra
el tiburón)—. Mi hermana sabe que no debe interponerse en mi
camino cuando deseo algo... y ahora mismo deseo mucho a Stiles—los
octarianos eran más fuertes, pero los sirénidos eran más rápidos.
Era fácil acelerar un poco y dejar a sus compañeros
temporales atrás.
Tan
pronto como estuvo lo bastante cerca para oír, pudo escuchar a John
gritándole a Stiles. Debajo de la ira había una capa de
miedo y solo un toque de orgullo; Peter esperaba que Stiles se tomara
en serio las tres emociones. Siendo honesto consigo mismo, también
estaba un poco molesto porque fuera John quien estaba gritando en
lugar de él. Nada entre él y Stiles era oficial, como Liam le había
recordado, por lo que no tenía ningún derecho a ser él quien
gritara. Había sentido miedo por su pareja y estaba enfadado porque
Stiles había ido a cazar tan tontamente por su cuenta; quería ser
él quien amenazaba con retorcerle el cuello, pero su padre todavía
tenía los primeros derechos al respecto, desafortunadamente, así
que Peter supuso que por ahora sería la pareja comprensiva y
guardaría las reprimendas para más tarde, cuando estuvieran solos.
Con
ese espíritu, Peter se deslizó hasta el costado de Stiles desde
atrás, extendiendo la mano sobre la parte inferior de su espalda
donde no había ronchas. Stiles, que había estado mirando desafiante
a su padre, se sobresaltó y miró a Peter. Al instante su expresión
se fundió en una de orgullo y placer, y repentinamente le resultó
difícil estar tan enfadado con el chico.
—Encontré
algo mejor que peces—declaró, señalando con la mano al druaqon
muerto—. Se supone que debo darte otro juego de cuentas ya que mi
primera ofrenda fue indigna-
—No
lo fue—interrumpió Peter, ofendido en nombre de su pareja—.
Estaba totalmente feliz de aceptar esos peces, Stiles. Había
planeado usarlos para hacernos a los dos una comida como mi primer
regalo de cortejo, pero creo que eso se ha arruinado—la cara de
Stiles decayó y la orgullosa pose de sus hombros se desplomó. Peter
se dijo a sí mismo que debía permanecer firme, tenía una
reputación que mantener y no se podía permitir que todos los
sirénidos reunidos vieran con qué facilidad Stiles lo tenía
bailando en la palma de su mano—. Espero que aceptes el tiburón
que maté con la ayuda de dos de tus compañeros y uno de los míos.
Ahí.
Eso no era demasiado blando para él, pero aun así devolvió algo de
luz a los ojos de Stiles.
—¿Mataste
a un tiburón por mí?
—Mm.
Bueno, lo maté mientras buscaba en el océano a mi prometido, que
desapareció sin dejar rastro, sin decirle a nadie cuál era su
destino. Durante ese intento bastante frenético de encontrarlo-
—Ya
lo pillo, Peter.
—Oh,
lo dudo mucho. De todos modos, cazamos el tiburón durante un
esfuerzo por protegerte y puedo preparar con él una comida igual de
buena en lugar de con tus peces. Tampoco necesito otro conjunto de
cuentas, Stiles—dijo mientras se inclinaba para rozar su mejilla
casualmente sobre la mandíbula de Stiles. Peter se sintió
profundamente complacido cuando dos de los tentáculos de Stiles
comenzaron a tocarlo de inmediato. La punta de uno exploraba las
escamas de su cola, mientras que la otra envolvía su cintura desde
atrás y se enroscaba alrededor de su costado para descansar también
sobre su pecho. Ya podía sentir la forma en que las ventosas de
Stiles le marcaban la piel y se pavoneó ante la evidencia de que su
pareja lo había elegido.
—Todo
esto es muy dulce—interrumpió John de repente, sonando exasperado,
enojado y cariñoso. Peter tenía la sensación de que la mezcla de
emociones era habitual alrededor de Stiles—, pero eso sigue siendo
algo increíblemente estúpido, Stiles. No tengo palabras para
expresar lo estúpido que ha sido. ¡Podría haberte sucedido
cualquier cosa y probablemente ni siquiera hubiéramos podido
encontrar el cuerpo!—Stiles se estremeció ante eso y Peter no pudo
evitar atraer al octariano protectoramente hacia su lado—. No me
puedes hacer eso, chico—dijo John, sonando de repente agotado—.
No puedes.
—Lo
siento, papá—dijo Stiles suavemente.
—Lo
sé, pero eso no arregla nada. Y eso por no hablar de este... este...
¡esto!—agregó John, haciendo un gesto hacia donde Peter y Stiles
estaban conectados—. ¿Qué es esto?
—Estamos
cortejándonos—respondió Peter con suavidad, deteniendo el intento
de Stiles de responder. Por la forma en que se había puesto rígido
contra él, tenía la sensación de que lo que fuera que Stiles iba a
decir no sería útil—, pero creo que cualquier discusión sobre
eso puede esperar hasta que mi pareja-
—¡Aún
no estáis emparejados!
—Detalles—replicó
Peter, descartando la preocupación—. Lo que quiero decir es que
Stiles está herido y cualquier discusión sobre nuestro cortejo
puede esperar hasta que haya sido atendido. Deaton debería haber
terminado con su brebaje a estas alturas—murmuró Peter, girando la
cabeza para pronunciar las palabras contra la sien de Stiles—. ¿Me
dejarás atenderte?
El
sonrojo que adornó las mejillas de Stiles era a la vez adorable y
delicioso, y Peter no tuvo más remedio que besar esa piel rosada.
—Eso
suena bien. Genial. Sí, hagamos eso. Oye, papá, por divertido que
haya sido esto, voy a dejar que mi pareja-
—No
estáis-
—¿Por
qué todos están tan preocupados por las formalidades?—se quejó
Stiles, con su carnoso labio inferior haciendo un mohín—. Hicimos
el primer paso del cortejo, que en realidad era el mismo, lo cual es
agradable, porque no hemos hablado de las diferencias entre cómo mi
gente corteja y cómo lo hacen los sirénidos—dijo, parpadeando al
darse cuenta—. Peter, ¿por qué no hemos hablado de eso?
—Porque
ayer me desperté y encontré peces esperándome frente a mi
puerta—le recordó al joven, riéndose mientras un rubor aún más
oscuro le bañaba la cara—. Solo habíamos hablado una vez. Tenía
la intención de esperar un poco más antes de ofrecerte una muestra
de mis intenciones. Tú te me adelantaste, cariño.
—Oh.
Cierto.
Cuando
Peter miró a John, parecía absolutamente resignado, incluso con una
mano cubriéndose los ojos.
—Stiles—dijo
John en un suspiro antes de mirar a ambos—, debería encerrarte en
tu habitación hasta que nos vayamos, pero tan solo encontrarías la
forma de escaparte y encontrar a Peter a pesar de eso, así que vale,
ve. Tenéis mi bendición. Solo trata de no saltarte ningún paso del
cortejo, por favor, por mi bien. Ah, y espero que vengas a quedarte
pronto con mi tribu, Peter. No os dejaré emparejaros hasta que eso
suceda.
—Por
supuesto. Había planeado hacer justo eso.
—Bien.
Ahora ve a cuidar de mi hijo.
—Sí,
señor.
Peter
ignoró la conmoción que estaba comenzando mientras más y más
sirénidos se enteraban de lo que había sucedido. Pasó rápidamente
junto a Talia sin decir una palabra, guiando a Stiles con una mano
firme pero amable en la parte baja de su espalda. Para cuando se
acercaron a la habitación de Peter, Stiles comenzaba a sentir
claramente el dolor. Sin embargo, el octariano no dijo una palabra al
respecto, prefirió morderse el labio inferior hasta que se puso
blanco y Peter comenzó a temer que se lo abriera. Los tentáculos
sobre Peter también se estaban apretando y estaba seguro de que le
quedarían moratones oscuros por las ventosas de Stiles. Si bien no
se oponía a ese resultado, no estaba satisfecho con la causa tras
ello.
—¿Tan
solo te has lesionado la espalda?—preguntó Peter, incapaz de
evitar lo brusco que sonaba.
—Sí—Stiles
lo miró cuando entraron en la habitación de Peter, viéndose
realmente inseguro por primera vez, que Peter pudiera recordar—.
Estás enfadado conmigo, ¿verdad? No era mi intención preocuparos
ni a ti ni a mi padre, lo juro. Pretendía regresar antes de que
nadie se diera cuenta de que me había ido. No es que eso lo mejore,
probablemente, pero no pensé que llevara tanto tiempo. Y tampoco
estaba intentando encontrar una criatura del abismo, precisamente,
tan solo... sucedió. Creo que estaba herido o era muy joven o algo
así porque se movía realmente lento y era bastante torpe. Creí que
iba a morir cuando accidentalmente me encontré con él—admitió,
encogiéndose ante el sonido herido que escapó de la garganta de
Peter. Sin embargo, siguió hablando, incluso mientras se recostaba
boca abajo en la cama de Peter—. ¡Quiero decir! ¿Esperaba poder
huir? Sí, iba a escapar, definitivamente. No es que simplemente me
lanzara ni nada. Nop. Yo no.
—¿Stiles?
—¿Sí?
—Esto
no está ayudando.
—Oh.
¿Lo siento?
La
llegada de Erica los interrumpió y les entregó el bálsamo que
Deaton había preparado. Se fue con un guiño lascivo, lo que hizo
que Peter pusiera los ojos en blanco. Acurrucándose en la cama al
lado de Stiles, suavemente lavó el icor que manchaba la piel de su
pareja antes de comenzar a aplicar la creación de Deaton sobre las
ronchas. Stiles no tomó la aplicación de una manera calmada y
estoica, el idiota gimió y se quejó todo el tiempo. Hizo que
cuidarlo fuera menos agradable e íntimo, y Peter realmente estuvo
cerca de estrangularlo antes del final.
La
forma en que Peter permaneció completamente embelesado a pesar de
eso hablaba de lo maravillosa que era su pareja.
Después
de quitarse la armadura –la limpiaría y la puliría más tarde–,
Peter se unió a Stiles en la cama. No era estrictamente apropiado,
pero se estaban cortejando y, teniendo en cuenta los acontecimientos
del día, Peter estaba bastante seguro de que se emparejarían más
pronto que tarde y que nadie podría detener su unión. No cuando
hacían tan buena pareja y no cuando solidificaría los lazos entre
sus dos pueblos. Además, Peter tenía la sensación de que a John le
costaría mucho encontrar a alguien tan dispuesto y ansioso por
quitarle a Stiles de las manos.
Stiles
se retorció y se contoneó y parloteó durante una ridícula
cantidad de tiempo antes de que Peter resoplara y arrastrara al
idiota más cerca. Entonces ambos se esforzaron por encontrar una
posición cómoda, lo que solo resultó más difícil por la forma en
que la única opción de Stiles era quedarse boca abajo. Finalmente
–por fin– se acomodaron con Peter boca arriba y Stiles
cubriéndolo a medias. Se sentía como si tuviera tentáculos por
todas partes, envueltos alrededor de su cola, torso y uno de sus
brazos. No podía abrazar a Stiles por temor a perturbar sus heridas
y el ungüento que trabajaba para curarlas, lo que significaba que
los dos se quedaron tumbados en una posición bastante incómoda
durante demasiado tiempo. La cara de Stiles estaba presionada contra
el costado de su cuello, donde probablemente comenzaría a babear y
ya estaba roncando. Tenía demasiado calor, estaba demasiado
aprisionado y demasiado consciente de Stiles como para quedarse
dormido con su habitual facilidad.
Peter
estaba seguro de que nunca se había sentido más contento en toda su
vida.
oooooohhh lo ame totalmente lo ame de verdad, fue tangenial de verdad.!!!!♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥
ResponderEliminarHermoso ❤️
ResponderEliminarlo subieron a wattpad?
ResponderEliminarAhhhhh me encanto demasiado!!!!
ResponderEliminar