Título: Anotaciones
Fandom: Stranger Things Pareja: Billy x Steve
Autor: KiraH69
Género: Yaoi, Slash
Clasificación: TP Advertencias: ninguna
Capítulos: 1
Resumen: Nancy se encuentra una libreta de Billy en la que hay anotaciones muy personales.
* * * * *
«No
sé por qué no puedo dejar de pensar en él».
«La
he cagado, la he cagado. ¿Cómo he podido hacerle eso?».
«¿Qué
hago ahora? ¿Cómo consigo».
«No
sé qué hacer. No sé qué quiero».
«Ya
no quedan señales en su rostro. Es un alivio no haberle dejado
ninguna cicatriz».
«Me
odia, sé que me odia. La forma en que me mira».
«Joder,
es tan».
«Esos
ojos. Tiemblo cada vez que me mira».
«Siento
su odio cada vez que me mira, pero necesito que me mire. Es horrible
cuando me ignora».
«Mi
padre me ha dado una paliza tan fuerte que creo que me ha roto algo.
Solo repetía marica, marica, marica. ¿Cómo lo ha notado?
¿Es que por su culpa es más evidente?».
«Esos
labios. Me están volviendo loco. Quiero besarlos. Morderlos».
«Creo
que hoy no me ha mirado con odio. No sonreía como le sonríe a esa
chica, pero tampoco había odio. ¿Es posible que me perdone?».
«Me
ha saludado. Me ha saludado con la cabeza. Creo que puede perdonarme.
Tal vez lleve tiempo, pero puedo esperar cuanto haga falta».
—Steve—Nancy
se acercó a él durante el descanso, sosteniendo entre sus manos una
pequeña libreta negra.
—¿Qué
pasa?—preguntó, poniéndose alerta al ver la expresión preocupada
de su amiga.
—He
encontrado esto—respondió, extendiéndole la libreta—. Vi cómo
se le caía a Billy cuando subía a su coche.
—¿Es
de Billy? ¿Y por qué me la das a mí?
—Creo
que deberías leer lo que pone. Es importante—insistió cuando vio
su reticencia.
Steve
cogió la libreta y titubeó un momento antes de quitar la goma que
la cerraba. Lo primero en lo que se fijó fue en la mala letra.
Después, en que la mayoría de las frases eran breves y algunas
estaban inconclusas. Entonces comenzó a leer. No lo comprendió al
principio, pero acabó dándose cuenta de que estaba hablando de él.
Todas esas frases eran sobre él.
—Dime...
Dime que no es lo que estoy pensando—casi suplicó con voz
temblorosa.
—Creo
que Billy está enamorado de ti—le confirmó Nancy.
—Joder.
¿Cómo...? No ha mostrado ninguna señal, ni siquiera... ni siquiera
se ha disculpado por lo que hizo—estaba confuso, intentaba recordar
algún momento en que hubiera dejado entrever lo que ponía en esa
libreta, pero no conseguía encontrar ninguno.
—Bueno,
es un chico al que le gusta otro chico. No es algo que se vaya
predicando por ahí, no es tan fácil como si le gustara una chica.
Encima, casi te mata de una paliza. Es normal que crea que no tiene
ninguna oportunidad. Además, ya lo has visto, necesita mantener su
imagen. Y... bueno, eso que pone de su padre...
Sí,
su padre. ¿Cuántas veces le había dado una paliza? ¿Era algo
habitual que lo golpeara? ¿Era por eso por lo que se comportaba de
ese modo? ¿Qué podría llegar a hacer su padre si descubriera que
estaba enamorado de otro hombre?
Cerró
la libreta de golpe y volvió a ponerle la goma. Necesitaba tiempo
para asimilar todo aquello, tenía que aclarar sus pensamientos.
Tenía que descubrir cuáles eran sus propios sentimientos al
respecto.
—¿Qué
vas a hacer con la libreta?—le preguntó Nancy.
Esa
era la primera cuestión. Si se la devolvía él mismo a Billy sabría
que había descubierto su secreto. Si se la devolvía Nancy lo mismo.
Tal vez era mejor dejarle pensar que la había perdido o conseguir
metérsela en la mochila de algún modo.
—¿Mañana
podrías encontrar el modo de metérselo en la mochila?—le preguntó
a Nancy porque ella podría acercarse con más disimulo. Si se
acercaba él sin duda le prestaría más atención.
—Sí,
claro, lo intentaré—extendió la mano para recibir la libreta,
pero Steve la sostuvo estrechamente entre sus manos.
—Mañana
te la devuelvo—le dijo Steve, guardando la libreta en su mochila.
—De
acuerdo—la expresión de Nancy era ilegible, pero sabía que de
algún modo le estaba juzgando.
Esa
noche, en su casa vacía (papá estaba de nuevo en un viaje de
trabajo y mamá en un balneario o algo así), Steve se tumbó en la
cama con la libreta en las manos. Sabía que no estaba nada bien
leerla, pero necesitaba hacerlo para poder entender mejor a aquel
chico que parecía estar ocultándose tras una gruesa máscara.
«¿Por
qué no puede mirarme como mira a esa Wheeler?».
«Casi
me tropiezo con él en el pasillo. Casi le toco».
«¿Por
qué no pueden ser las cosas diferentes? ¿Por qué no puedo
arreglarlo?».
Leyó
la libreta de principio a fin más de una vez hasta quedarse dormido
con ella en las manos.
A la
mañana siguiente, en la escuela, esperó a que Nancy desapareciera
tras las puertas del instituto para no tener que entregarle la
libreta antes de aparcar el coche. Después, esperó a que llegara
Billy y se acercó a él. El chico se puso de inmediato en una pose
agresiva, pero a Steve no podía engañarlo más.
—He
encontrado esto—le dijo, mostrándole la libreta.
Billy
se quedó blanco como la leche, inmóvil, sus manos temblando en
puños a los costados.
—No
sé si puedo corresponder a tus sentimientos—comenzó antes de que
hiciera alguna locura—, pero creo que podríamos empezar por ser
amigos.
Billy
le miró pasmado, como si no pudiera entender lo que estaba diciendo.
Steve le tendió la mano y esperó pacientemente hasta que Billy
reaccionó y le dio la mano.
—¿Esto
es real?—preguntó como si le resultara del todo inverosímil.
—No
eres tan mal chico como intentas aparentar. Me gustaría poder
conocer al verdadero Billy.
—Lo
que te hice...
—Pasemos
página y olvidémoslo. Aquellos fueron momentos difíciles para
todos—le sonrió con esa sonrisa que al parecer tanto le gustaba y
por un momento pareció que se derretía.
—D-de
acuerdo.
—Bien.
¿Quedamos después de clase?
Ni
siquiera le dio tiempo a responder. Le entregó la libreta y se
marchó a clase. Aquello podía salir muy mal o también podía
acabar mejor de lo que pensaba. Esperaba que fuera esto último.
💕
ResponderEliminarEs tan hermoso, muchas gracias por crear está historia 💖✨
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